Pudo ser diferente
Cuando el Rab Naftalí Tzvi Yehuda Berlín zt”l, llamado el “Netzib de Volozhin”, publicó su comentario sobre la Torá “Haamek Davar”, hizo una gran celebración, a la cual invitó a todos los Rabinos de la región.
Entre otras cosas, él comentó que su alegría era muy grande porque en su juventud, su padre quiso que interrumpiera sus estudios en la Yeshivá y que aprendiera un oficio para ayudar al sustento familiar.
Dijo el Rabí:
Pero yo quise continuar mis estudios. Si hubiera cedido y abandonado la Yeshivá como me exigió mi padre, me hubiera convertido en un simple judío y no hubiera llegado a escribir libros… Después de mi muerte, al presentarme ante la Corte Celestial, Dios tomaría el libro de la Torá con el comentario Haamek Davar y me diría: “Te presentaste aquí como un simple judío, pero tenías las fuerzas suficientes para escribir un maravilloso comentario…”
¡Qué gran vergüenza hubiera sentido! ¡Feliz yo soy, que me salvé!