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6. Tishrei 5786

בס”ד

Yom Kipur

La mitzvá del Vidui

Pregunta

Los días entre Rosh Hashaná y Yom Kipur son apropiados para la Teshuvá (el arrepentimiento), y escuché que uno de los elementos de la Teshuvá es el Vidui, “la confesión”. ¿Podría explicarme el tema?

Respuesta

La Teshuvá puede ser algo fácil, ya que está cerca de nosotros, como dice el versículo: “Está muy próxima a ti: en tu boca y en tu corazón para cumplirla” (Devarim 30:14).

En su libro Mishné Torá (Leyes del Arrepentimiento, capítulo 1), Rabí Moshé ben Maimón, el Rambam z”l, escribió:

  1. Si una persona transgredió deliberadamente o por descuido cualquiera de los preceptos de la Torá, “activo” o “no-activo”, al arrepentirse de su error debe confesarse ante Dios, bendito sea. Como está escrito: “Cuando un hombre o una mujer cometiere… confesarán el pecado que cometieron” (Bamidvar 5:6-7). Esto se refiere a la confesión verbal.
  2. ¿Cómo es la confesión? Debe decir: “¡Oh Dios! He errado, he obrado mal, me he rebelado contra ti, e hice tal y tal cosa, y ahora lo lamento, me avergüenzo de lo que hice y jamás repetiré ese acto”. Esta es la esencia de la confesión. Pero cuanto más amplia y detallada sea la confesión, mejor será.
  3. Vemos entonces que no basta que los pecadores y los transgresores ofrendan sacrificios (en la época del Templo) por sus faltas deliberadas o involuntarias, para que éstas les sean perdonadas. En cambio, antes de hacerlo, deben arrepentirse y confesarse de palabra, como está escrito: “Y confesará el pecado que cometió” (Vaikrá 5:5). Asimismo, a todos los que eran condenados a la pena de muerte y a la castigo de los azotes, el sólo hecho de recibir la sentencia no los hacía merecedores del perdón si no se arrepentían de su pecado y se confesaban. También el que golpea a su prójimo o le causa algún perjuicio económico, aun si le pagará todo lo que le debe, no obtendrá el perdón hasta que se confiese y se arrepienta y tenga la determinación de no volver a obrar como lo hizo.
  4. En estos tiempos en que no tenemos el Templo Sagrado, y no tenemos el Altar que nos expían, no hay otra cosa más que el arrepentimiento. El arrepentimiento expía por todas las transgresiones. Incluso alguien que fue malvado durante toda su vida, si al final se arrepiente, no se le recuerda nada de su maldad. Como está escrito: “El malvado no tropezará por su maldad, el día en que se arrepienta de ella” (Yejezkel 33:12). Y Yom Kipur por sí mismo es suficiente para la expiación para los arrepentidos; como está escrito: “Pues en este día serán perdonados” (Vaikrá 16:30).

Según el Rambam, la Teshuvá incluye varios elementos:

  1. El pecador debe abandonar su pecado pasado y alejarlo de su mente.
  2. Debe arrepentirse y lamentarse de lo que hizo en el pasado.
  3. Debe decidir no cometer nuevamente el pecado en el futuro, y su decisión debe ser tal “que Dios atestigüe que no volverá a incurrir en ese pecado jamás”.
  4. Debe confesar verbalmente los pecados que cometió, y la confesión es una condición para la expiación de su pecado.

Yom Kipur es el final de los “Diez días de arrepentimiento”, y es obligación hacer Teshuvá y confesarse en este día.

Y es correcto leer de antemano las distintas oraciones y rogativas del Día del Perdón, para profundizar la comprensión de su mensaje y su significado.

Sin duda, el hacerlo facilita la Teshuvá y el perdón Divino de los pecados.

La Tradición de las Kaparot

Se acostumbra hacer “las Kaparot” en la víspera de Yom Kipur; o en los días anteriores, si se dificulta hacerlo en la víspera.

Aunque hay diferentes opiniones Rabínicas con respecto al origen y a la razón de esta costumbre, todos concuerdan en que es una tradición muy antigua. Y hoy en día es de cumplimiento bastante generalizado.

La idea detrás de esta costumbre es el razonamiento de que los Korbanot (los sacrificios del Templo) proporcionaban Kapará, “expiación” de los pecados, al tomar al animal sacrificado en lugar del pecador. De manera similar, en la costumbre de “las Kaparot” el hombre selecciona un gallo (y la mujer, una gallina) y declara: “Éste es mi sustituto, éste me reemplaza, éste es mi expiación”. Y luego agrega: “Esta ave irá a su muerte, mas yo iré a una vida larga y con paz”.

Esto se dice mientras se gira el ave tres veces sobre la cabeza.

Subsecuentemente, el gallo (o la gallina) es degollado según todas las leyes de la Shejitá.

Puesto que no se trata de un “sacrificio aviar”, como los que se realizaban en el Templo Sagrado de Jerusalem, cualquiera tiene permitido comer el ave.

Realmente se acostumbra regalar a los pobres y necesitados el gallo o la gallina, para añadir también el mérito de la caridad. Pero si hacerlo podría llegar a ofenderlos, se acostumbra darles el valor del ave como caridad.

Hoy en día muchos acostumbran hacer “las Kaparot” con dinero, en lugar de usar un ave, y luego dan ese dinero para tzedaká, caridad. El texto que en dicho caso se dice también figura en los Majzorim, los libros de oraciones para Yom Kipur.

Un punto fundamental que debemos recordar al realizar las Kaparot (ya sea con un ave o con dinero) es lo que mencionó Maimónides z”l en referencia a los Korbanot, los sacrificios: Ningún sacrificio redime o expía los pecados y las faltas a menos que venga acompañado de un arrepentimiento verdadero.

Y en relación con esto explicó el Rambán, Najmánides z”l:

El individuo que ofrece un sacrificio sobre el altar, y ve como la sangre del animal es derramada, tendría que pensar que esa debería ser su propia sangre. ¡Su propia sangre debería ser derramada por los pecados que cometió! Habrá de considerar el abrasamiento de aquel animal sobre las llamas como su propia incineración, en castigo y condena por sus propias transgresiones. Y después de reflexionar acerca de esto la persona debería entender que, a pesar de sus numerosos pecados, el Eterno le concedió una alternativa para arrepentirse y retornar a Él, debido a Su gracia y bondad.

Algunas leyes de Yom Kipur

El perdón en Yom Kipur

  1. Es importante recordar que Yom Kipur no expía las malas acciones que cometimos contra nuestros semejantes, a menos que nos reconciliemos con ellos. Aun si nuestro pecado sólo fue mediante la palabra, es nuestro deber acudir personalmente a ellos y pedirles perdón.
  2. Aquél a quien se le pide perdón no debe endurecer su corazón, negándose a perdonar, sino que debe otorgar un perdón sincero.
  3. Si entre las personas hay una discusión económica, deben acordar y aceptar acudir a un Rabino después del Día del Perdón para que decida en el caso.

La víspera de Yom Kipur

  1. En la tarde anterior al Día del Perdón se come la Seudá Hamafséket, la última comida antes del ayuno. Esta comida es festiva, y reemplaza a la comida que deberíamos realizar en Yom Kipur.
  2. Aunque en general no hay ninguna limitación con respecto a las cantidades, es correcto que la persona se abstenga de comer tanto que luego se sienta muy pesada y le sea difícil realizar los rezos del Día del Perdón. En el menú debe haber comidas de fácil digestión, por ejemplo, carne de ave; y están prohibidos los alimentos con demasiadas especias.
  3. En la víspera de Yom Kipur, en principio hay que tratar de terminar de comer y beber antes del horario de encendido de velas. Si eso no es posible, hay que terminar de comer y beber por lo menos algunos minutos antes del horario de la puesta del sol (según el calendario judío de cada ciudad).

El encendido de las velas

  1. Al terminar todos los preparativos para el día sagrado, la mujer enciende las velas y recita la siguiente bendición (ésta figura en los libros de oraciones): Baruj Atá… asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu lehadlik ner shel Yom Hakipurim, “Bendito eres Tú… que nos consagró con Sus preceptos y nos ordenó encender las velas del Día del Perdón”.
  2. También se recita la bendición de Shehejeyanu: Baruj Atá… shehejeyanu, vekiemanu vehiguianu lazemán hazé, “Bendito eres Tú… que nos dio vida, nos mantuvo y nos hizo llegar a este tiempo”.

Leyes generales en Yom Kipur

  1. Yom Kipur es un día de ayuno absoluto. Comienza un par de minutos antes de la puesta del sol, y termina con la salida de las estrellas al día siguiente. Está prohibido comer o beber cualquier cosa durante esas 24 horas, salvo por orden médica, y después de consultar con un Rabino cómo proceder.
  2. En Yom Kipur está prohibido lavarse, untarse cremas, usar calzado de cuero y mantener relaciones maritales.
  3. Está prohibido lavarse las manos, incluso con agua fría. Quien se ensució, tiene permitido higienizarse el área que necesita.
  4. Al despertar por la mañana, hay que lavarse sólo los dedos de las manos (sin las palmas), para prepararse para la oración de Shajarit. Lo mismo se debe hacer por la tarde, para el rezo de Minjá.
  5. Los Cohanim pueden lavarse las manos normalmente para realizar la Bircat Cohanim.
  6. Está prohibido untarse con cremas, aceites, perfumes, etc. Pero está permitido oler perfumes.
  7. Está prohibido usar zapatos de cuero, o con suela o revestimiento de cuero. Únicamente se puede usar calzado que sea totalmente de goma, de tela, etc.
  8. Las relaciones íntimas están totalmente prohibidas, e incluso hay que abstenerse de dormir con la esposa en la misma cama.

Al concluir Yom Kipur

  1. Al final de Yom Kipur se acostumbra tocar el shofar para mostrar que el día sagrado concluyó.
  2. Así como es la ley en Shabat, aun después del shofar estará prohibido realizar cualquier labor prohibida si no se dice antes la frase Baruj hamavdil ben kódesh lejol, “Bendito es Él, que diferencia entre el día santo y el día profano”.
  3. Al terminar el día sagrado todavía está prohibido comer y beber líquidos antes de hacer la Havdalá con vino (así como es la ley en Shabat).
  4. Según muchas autoridades Rabínicas también está permitido beber agua al finalizar Yom Kipur, incluso antes de recitar la oración de Arvit de Motzaé Shabat o de hacer Havdalá o de decir la frase Baruj hamavdil ben kódesh lejol (así como es la ley en Shabat). No obstante, algunas autoridades escribieron que al terminar Yom Kipur es necesario decir la frase Baruj hamavdil ben kódesh lejol antes de beber agua.
  5. A diferencia de la ley en Shabat, en la Havdalá de Yom Kipur no se recita la bendición por la fragancia aromática. Otra diferencia en la Havdalá es que aquí se debe usar una vela que permaneció encendida durante todo el día sagrado, o que fue encendida de un fuego que permaneció encendido durante todo el día sagrado.
  6. Dijeron nuestros Sabios: Al concluir el santo Día de Kipur sale una Voz Celestial que proclama: “¡Ve a comer tu pan con alegría!”, y hay que hacer una comida especial para festejar el perdón de los pecados.
  7. Muchos acostumbran recitar la Bircat Halebaná (la bendición de la luna) después de Yom Kipur.

Kol Nidré: Que todos los votos se anulen

Antes de comenzar el servicio del sagrado día de Yom Kipur, el jazán y toda la congregación recitan con mucho fervor y estremecimiento el Kol Nidré.

¿Qué es el Kol Nidré?

El Kol Nidré no es una plegaria ni una súplica. La traducción literal de las palabras Kol Nidré (o mejor dicho Kal Nidré, en arameo) es “Todos los votos”.

El Kol Nidré es básicamente una declaración de nulidad de los votos y juramentos que por error podríamos formular en el futuro.

Además, en la mayoría de las comunidades se agrega dentro del Kol Nidré una línea que dice que también pedimos la anulación de los votos y juramentos que hayamos formulado en el pasado.

La costumbre de recitar el Kol Nidré es muy antigua, y precedió a la costumbre de realizar en la víspera de Rosh Hashaná una Hatarat nedarim (anulación de votos y juramentos). Aunque todo el pueblo de Israel asiste a la sinagoga en Yom Kipur, debido a varias razones halájicas las autoridades Rabínicas escribieron que es mejor no apoyarse sólo en la recitación del Kol Nidré para anular los votos futuros (y pasados), sino hacer una anulación y una declaración adicional en érev Rosh Hashaná.

Cualquier texto de Hatarat Nedarim con respecto a los votos formulados en el pasado se debe recitar en presencia de tres hombres mayores de Bar Mitzvá. Sin embargo, para recitar una Declaración de nulidad de votos futuros, que podría llegar a formular en el año entrante, no es necesario reunir tres hombres. Por eso, si alguien no puede ir a la sinagoga en Yom Kipur, igualmente podrá recitar en su casa el texto del Kol Nidré con respecto a los votos futuros.

Quien no comprende el idioma hebreo y arameo del Kol Nidré, debe leer el texto en el idioma que entienda.

Antes del Kol Nidré

Antes del Kol Nidré el oficiante proclama que la anulación de los votos será realizada con la autorización “de la Corte Celestial y de la comunidad” y que está permitido rezar junto a los transgresores.

Esta proclama fue establecida por el Rabino Meír de Rottenberg z”l (1220-1293). La intención es permitir rezar en el Día del Perdón junto aquellos judíos que infringieron los reglamentos públicos, por lo cual fueron excomulgados de la comunidad.

Hay quienes opinan que ese texto también se refiere los marranos, que se convirtieron exteriormente al cristianismo pero en su interior quedaron fieles a la fe judía, e iban a la sinagoga en la noche de Yom Kipur para rezar junto a la comunidad.

Urgentísimo...

Uno de los seguidores del Rabí de Gur z”l, el autor de la obra Sefat Emet, se acercó en “los Diez días de arrepentimiento” para pedirle un consejo por un asunto comercial.

“Se trata de un asunto muy urgente…”, se excusó frente al santo Rabí.

Le contestó el Rabí:

“Hoy sólo hay una cosa urgente para hacer. ¡Teshuvá! ¡Eso es realmente urgente: arrepentirnos de nuestras malas acciones!”

El alfabeto

Preguntaron a Rabí Itzjak:

“¿Por qué los textos de confesión de pecados que recitamos en el Día del Perdón fueron escritos siguiendo el orden alfabético?

El Rabí explicó:

“Si no fuera así, no sabríamos cuándo dejar de golpearnos el pecho al mencionar los pecados. Porque el pecado no tiene fin, y no debería tener fin nuestra conciencia de los pecados que cometimos. Pero el alfabeto sí tiene fin”.