La Haftará de Bejukotai tiene por tema la confianza y la paz espiritual.

“Bendito es el hombre que confía en HaShem; ¡HaShem será su apoyo!” (Yirmeyahu 17:7).

En relación con el versículo “Y harán los hijos de Israel el sacrificio de Pésaj en su tiempo debido” (Bamidvar 9:4), el Talmud (Tratado de Pesajim 65) comenta: “‘En su tiempo debido’, incluso en Shabat, e incluso con impureza”. Esto enseña que la orden Divina es no aplazar la realización del Korbán Pésaj por ninguna razón. Incluso si la víspera de Pésaj cae en Shabat, había que realizar el Korbán en Shabat. Aun si todo el pueblo estaba en estado de impureza ritual, igualmente no se debía aplazar su realización.

Podemos explicar que el Shabat representa la paz; y la impureza, la muerte de personas en la guerra.

Ante cualquier situación, en momentos de paz o de guerra, debemos saber cumplir con nuestra obligación. No necesitamos una señal especial para saber que nos es posible cumplirla, porque Dios creó al hombre con fuerzas espirituales tales que le permiten realizar Su voluntad en cualquier momento y situación.

“¡Bendito es el hombre que confía en HaShem; ¡HaShem será su apoyo!”